Carlos García Gual, en el marco de la celebración de los cien años de la desaparición de Pavese: «Tan sólo querría, al socaire de estas fechas, comentar la originalidad y el raro atractivo de su más extraño libro: Diálogos con Leucó. Éste fue, según él manifestó de modo firme, su preferido, a contrapelo de la incomprensión de la mayoría de los críticos; el libro que, de manera significativa, dejara como una reliquia enigmática sobre la mesilla de noche del hotel el día de su suicidio junto a la conocida nota final de despedida: «Perdono a todos y a todos pido perdón. ¿Va bien? No hagáis demasiados chismorreos». En Claves de la Razón Práctica n.º 192. Leer el artículo completo (PDF).
Fuente: El Boomeran.
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Kafka, un amigo de tantos años.
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